¿Qué ingredientes en el maquillaje siempre debes evitar?
Maquillarnos es uno de los más grandes placeres que podemos experimentar las mujeres de modo cotidiano
Decía el coro de una canción del grupo español Mecano, “Sombra aquí, sombra allá, maquíllate, maquíllate…” y como nos fascina la idea de poner una capa de rubor, delineador y labial sobre el rostro para destacar nuestros atributos y sentirnos más guapas que nunca con esos tonos: metálicos, brillantes, matte u oscuros con tal de hacer nuestra cara más atractiva e inolvidable. ¿Pero qué pasa cuando estos grandes aliados, también pueden ser la fuente de irritación,alergias y hasta cáncer de piel? Para que ello jamás te suceda te vamos a enseñar una guía rápida para leer las etiquetas y sacar de por vida estos ingredientes de tu rutina de belleza.
Recuerda invertir en un maquillaje libre de compuestos nocivos como parabenos o derivados de petróleo así como libres de crueldad animal, siempre serán la mejor opción. Quizá sean más costosos, pero recuerda belleza es salud y tú lo vales.
¿Porqué es importante leer las etiquetas?
Tanto en la comida como en los productos para la piel, es básico identificar aquellos ingredientes que son dañinos o benéficos para tu salud, sabemos que a veces es imposible tenerlo presente y confiamos en lo que la publicidad dice, pero como un acto de amor propio, dedícale un poco más a tu compra y llévate lo mejor a casa. A veces resulta que por comprar el producto económico estamos haciendo más daño a nuestra piel o a la inversa porque invertimos más creemos que lo estamos haciendo bien y no. Estas sustancia no sólo envejecen la piel sino que ocasionan daños prematuros en el sistema linfático, y circulatorio, llegando alcanzar órganos como páncreas e hígado, por más extraño que parezca, ten presente que la piel absorbe todo lo que le des, así que cuida de ella atentamente.
Estos son los ingredientes que debes evitar para mantener a tu piel saludable
Puede que parezcan inofensivos a simple vista pero, su uso prolongado por años e incluso décadas pueden propiciar pérdidas de la salud y enfermedades crónico-degenerativas.
- Parabenos: Muchos productos comerciales y de higiene personal contienen parabenos, este químico contiene propiedades bactericidas por ello suelen ser usados de modo regular ya que impide que los productos caduquen antes de tiempo. Y pese a que se piensa que son químicos de baja toxicidad, su consumo en exceso puede resultar en cáncer, en especial cáncer de mama en las mujeres. Los parabenos se encuentran usualmente en cremas, desodorantes, y lociones para la piel.
- Butilhidroxitolueno (BHT): Estos conservadores y antioxidantes se usan principalmente en maquillajes como bases y polvos. Lamentablemente BHA es tóxico muy tóxico para el sistema autoinmune por lo cancerígeno que es al afectar especialmente pulmones, y el hígado. Ambos ingredientes pueden causar alergias también, así como alterar los flujos hormonales.
- Petrolato: Aunque suelen pasar desapercibidos y no tienen olor, estos se encuentran en varias máscaras y cremas corporales. Su uso frecuente puede causar alergias y sobre todo tapar los poros de la piel, lo que previene que algunas sustancias importantes entren en la piel como la vitamina D del sol.
- Siloxanos: Estos químicos añadidos son de los menos conocidos, pero igualmente peligrosos, porque son usados en los cosméticos para brindar texturas. Trayendo problemas en hígado y riñones.
- Ftalatos: Estos químicos son disolventes y suavizantes en la industria de cosmética. Sin embargo, son llamados “venenos medioambientales,” porque son agentes destructores que además de envejecer al cuerpo por dentro también lo hacen por fuera. Por si fuera poco, científicos de la Universidad de Michigan descubrieron que puede ocasionar malformaciones en el feto, si la mujer que los usa está en cinta.
- Parafina: Otro de los ingredientes tóxicos más usuales en la industria de la belleza. Este derivado del petróleo es muy económico y se utiliza para crear una capa impermeable en la piel. Pero por ser tan fuerte, impide que la piel respire e impide la expulsión de partículas contaminantes.