Cuál es la diferencia entre el ácido glicólico y el ácido salicílico para el cuidado de la piel

El ácido glicólico y salicílico cada vez son más populares en las rutinas de cuidado de la piel, aunque ambos funcionan para tratar diferentes necesidades sobre el rostro

12 de Septiembre de 2023 - 19:48

Los ácidos para el cuidado de la piel cada vez son más incluidos dentro de las rutinas de belleza, ya que destacan por aportar una serie de beneficios, como tratar algunas imperfecciones y aportar un aspecto saludable. De hecho, las presentaciones más conocidas en la actualidad son el ácido glicólico y el salicílico, que forman parte de una gran variedad de productos y suelen ser muy nombrados dentro de las redes sociales. Sin embargo, estos no cumplen con las mismas funciones sobre la piel, ni pueden usarse de formas similares. Por ello, en esta ocasión nos encargaremos de compartirte qué es el ácido glicólico y el ácido salicílico, así como los beneficios y sus diferencias.

¿Qué es el ácido glicólico?

El ácido glicólico es una sustancia alfahidroxiácida (AHA), que se caracteriza por ser soluble en agua y se deriva principalmente de recursos naturales, como la caña de azúcar, plantas, frutas y leche. Este ácido destaca principalmente por presentar la molécula más pequeña del grupo AHA, razón por la que es muy utilizado en diferentes productos debido a que logra penetrar y ser absorbido con mayor facilidad sobre la dermis. No obstante, este sustancia también es una de las más delicadas, ya que aporta un efecto exfoliante que puede causar irritación o descamación si se utiliza de la forma incorrecta o con una concentración muy alta.

Los productos que contienen ácido glicólico principalmente se encargan de eliminar las células muertas de la piel por su efecto exfoliante, favorecer la renovación de las células, aclarar las zonas oscuras para obtener un tono uniforme, aumentar la producción de colágeno y combatir los principales signos de envejecimiento, como arrugas y manchas ocasionadas por la exposición solar. Sin embargo, para disfrutar de sus beneficios se recomienda buscar productos que presenten concentraciones entre 4% y 10%, ya que un número superior podría causar una irritación severa sobre el rostro. Por ello, se recomienda usar principalmente en el cuerpo, como en las axilas.

¿Qué es el ácido salicílico?

El ácido salicílico es una sustancia beta hidroxiácida (BHA), por lo que presenta una estructura más soluble en aceite. En muchos casos se pensaría que este componente se obtiene de forma artificial, aunque se encuentra de forma natural en algunas plantas y un claro ejemplo de ello son los sauces. Sin embargo, algunos productos son diseñados con ácido salicílico sintético, el cual esta aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), y es muy buscada por ser una solución ideal para tratar las necesidades del rostro.

Esta sustancia principalmente se encarga de limpiar la piel a profundidad, descomponer las células muertas, desobstruir los poros, eliminar el exceso de grasa, combatir las bacterias, favorecer la regeneración, exfoliar el rostro sin causar irritación, calmar las inflamaciones e inhibir las glándulas sebáceas. En este sentido, el ácido glicólico es principalmente recomendado para las personas con piel grasa y con tendencia a los brotes de acné, ya que permite reducir la aparición de espinillas y puntos negros, así como ayuda a mantener los poros limpios y evitar el aspecto grasoso que suele formarse.

Diferencias para el cuidado de tu piel

El ácido salicílico puede ser usado diariamente para tratar los brotes de acné en el rostro, mientras que el glicólico solo se recomienda usar una vez a la semana para evitar lesiones.
El ácido glicólico debe aplicarse, esperar 5 y retirar, mientras que la opción contraria puede usarse durante toda la noche.
Al ser soluble en aceite, el ácido salicílico trabaja mejor sobre las pieles grasas o mixtas.
El ácido glicólico causa fotosensibilidad, por lo que puede aumentar los daños causados por el sol sobre la piel, mientras que el salicílico no fotosensibiliza. Por ello, no se recomienda usar la primera opción en el día.
El ácido glicólico causa mayor irritación sobre el rostro, por lo que no se aconseja usar en pieles sensibles.
Para los brotes de acné se recomienda usar ácido salicílico, mientras que para las manchas se recomienda ácido glicólico.