Covid: cuán seguro es ir a un salón de belleza
La pandemia de Covid-19 cambió la experiencia de acudir al salón, ahora es importante tomar precauciones
Conoce qué tan seguro es acudir al salón durante la pandemia de coronavirus en curso. Crédito: Süheyl Burak | Unsplash
Desde el 2020, el COVID-19 ha cambiado mucho las citas en los salones de belleza. Por obvias razones, los servicios de salón o spa, como manicuras y pedicuras o masajes de cuerpo completo, se realizan con cierta proximidad con los demás, lo cual aumenta el riesgo de contraer el virus.
El coronavirus se propaga cuando las personas infectadas tosen, estornudan o hablan y otros respiran esas gotitas, o cuando el virus se acumula o fluye por el aire. Las personas también pueden contraer el coronavirus a través de superficies contaminadas, pero este modo de transmisión es menos común, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos.
Antes de la pandemia de COVID, cuando iba a salones de belleza o spas lo común era relajarse todo el tiempo que quisieras. “Desafortunadamente, estamos un poco más lejos de la forma en que pensamos sobre” estas experiencias, dijo a CNN el año pasado Regina Davis Moss, directora ejecutiva asociada de política y práctica de salud de la Asociación Estadounidense de Salud Pública.
“Realmente se trata más de obtener el servicio que de la experiencia… Creo que si nos enfocamos solo en obtener el servicio y tratamos de hacerlo lo más rápido posible, tratando de minimizar nuestro riesgo, lograremos algo mucho mejor”.
Las personas vacunadas tienen un riesgo mucho menor de enfermedad grave por coronavirus, así como de hospitalización. Las personas no vacunadas están más desprotegidas, pero ambos grupos deben tomar ciertas precauciones al acudir al salón.
Sin olvidar que deben usar mascarillas KN95 y N95 pues son las más seguras ante la variante Ómicron.
Qué tan seguro es ir al salón de belleza en pandemia
Antes de programar una cita en un salón o spa, llama a la empresa o consulta su sitio web para asegurarte de que el personal siga las pautas de los CDC para salones de belleza y barberías, o una guía similar del gobierno local de la empresa.
Las precauciones de seguridad recomendadas, para el personal y los clientes, incluyen el uso constante de mascarillas o cubrebocas, el mayor distanciamiento físico posible y la limpieza entre cada cliente.
Los salones de belleza deben limpiar los siguientes artículos entre cada cliente, según los CDC: sillas de peinado, lavabos para lavar el cabello, equipos de pago, fundas para sillas, capas de salón y cualquier otra herramienta utilizada para limpiar y peinar el cabello. Los CDC también han recomendado que el personal establezca barreras físicas entre los trabajadores cuando sea posible.
Los salones de uñas también deben desinfectar sillas, mostradores, mesas, lámparas de uñas y cualquier otra superficie que se toque con frecuencia, como los esmaltes de uñas que se usan, entre clientes. Algunos salones de manicura podrían haber instalado pantallas de plástico entre los técnicos de uñas y los clientes, dijo la Dra. Ada Stewart, médica de familia de Cooperative Health en Columbia, Carolina del Sur, y presidenta de la Academia Estadounidense de Médicos de Familia.
No es aconsejable hacerse un tratamiento facial, ya que sería necesario quitarse la mascarillas, pero si lo haces, tanto tú como el empleado deben estar completamente vacunados, dijo la Dra. Leana Wen, analista médica de CNN, médica de emergencias y profesora visitante de política y gestión de la salud en la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington.
Si “estás completamente vacunado pero tu esteticista no, entonces ten en cuenta que estás tomando un riesgo… En ese caso, debes tratar de reducir el riesgo en otros aspectos de tu vida”, dijo.
La calidad de la ventilación es importante para todas las áreas interiores, pero especialmente en los salones de belleza, ya que los secadores de pelo y los ventiladores personales pueden soplar aire cargado de virus si hay personas infectadas presentes.
Si bien el distanciamiento físico puede ayudar a prevenir la propagación de gotas respiratorias grandes que transportan coronavirus u otros gérmenes, no protege a los asistentes al salón del aire interior, que es el mayor riesgo en los salones.
Los gerentes de los salones deben asegurarse de que se implementen otras medidas para habitaciones bien ventiladas, incluidas ventanas o puertas abiertas cuando sea posible y purificadores de aire portátiles que tengan filtros HEPA (aire de partículas de alta eficiencia).
“Dependiendo de lo que te estés haciendo, el cabello puede tardar más, y el tiempo también aumenta el riesgo de exposición”, dijo Wen. “Lo mismo se aplicaría a los salones de uñas”.
Recuerda llevar mascarillas o cubrebocas adicionales en caso de que una se moje durante la cita para un corte de cabello o el spa, ya que las máscaras húmedas pueden ser menos efectivas y dificultar la respiración, según los CDC.
Una vez que estés en el salón, usa una máscara en todo momento a menos que te vayas a hacer un tratamiento facial.
Si tienes que cambiarte en un área compartida, también debes distanciarte físicamente tanto como sea posible de otras personas que no viven en tu hogar y “reducir tu tiempo allí”, dijo Wen. Mantente al menos a 6 pies de distancia de los demás cuando estés en la sala de espera también.
“Si se trata de un salón repleto y hay otros clientes a menos de 6 pies de ti en el interior, eso se convierte en un entorno de mayor riesgo que deberías evitar”, dijo la Dra. Leana Wen.
