Paso a paso: en qué orden aplicar tus productos de cuidado de la piel

Sabemos que existen productos que hacen toda la diferencia en la salud interior y exterior de nuestra piel, ¿pero qué hacemos cuando agregamos uno más a nuestra rutina? ¿en qué momento lo ponemos? Estas son preguntas que todas nos hacemos en algún momento y es completamente normal, sobre todo cuando gastamos una considerable cantidad en ellos. 

Porque ese es el tema, existen recomendaciones de uso para que cada producto haga su trabajo y nos proporcione los beneficios que prometieron. Y de verdad, el orden en el que aplicamos los productos para la piel, puede hacer toda la diferencia. 

Hoy te queremos compartir una guía sencilla que puedes poner en práctica desde el momento en que la leas, para que te asegures de darle la mejor oportunidad a los productos y saques de ellos toda la ventaja posible. 

Rutina para la mañana

La rutina de cuidado de la mañana está diseñada para protegerte del sol, la contaminación y los elementos naturales. 

• Paso 1: limpieza con un producto para tu tipo de piel. 
• Paso 2: tonificante que proporcione los ingredientes o sustancias que tu piel necesita. El toner ya no es un producto que seca la piel, siempre y cuando esté diseñado para proporcionar un beneficio extra. 
• Paso 3: serum que responda a las necesidades de tu piel, desde humectación hasta protección. 
• Paso 4: crema de ojos, recuerda aplicarla con el dedo anular porque es el que menos fuerza tiene y por tanto, menos presión genera en el área. 
• Paso 5: crema hidratante y esto es para las personas que necesitan que esa capa extra asegure que la humectación quede sellada dentro de la piel (pieles normales o secas). 
• Paso 6: bloqueador solar… y sí, aunque no estemos en la playa debemos usar un producto que nos proteja de los rayos UV. 

Rutina para la noche 

Nuestra piel, como el resto de nuestro cuerpo, se regenera en la noche; por lo que es muy importante que le proporcionaremos a la piel el tratamiento que necesita para verse y sentirse genial. 

• Paso 1: limpieza doble. Primero con una limpieza de aceite, que se encarga de eliminar la mayor cantidad de maquillaje, sobre todo si usas productos a prueba de agua. Pero después de esta primera limpieza, se recomienda hacer una segunda con un limpiador líquido o en jabón. Estos 2 pasos, son la clave para eliminar TODO el maquillaje, o suciedad, del rostro.
• Paso 2: tonificantes, esencias y boosters. Si eres de las chicas que usa tones, aplícalo sobre la piel limpia y si tienes una esencia o un booster, este es el momento de ponerlo en la piel porque está en el momento ideal para absorberlo y aprovecharlo. 
• Paso 3: crema de ojos. Recuerda cubrir la parte de las ojeras, así como las líneas de expresión en la parte inferior del párpado y en las esquinas. 
• Paso 4: tratamientos, serums o peels. Después de limpiar e hidratar las zonas más delicadas, puedes aplicar los productos más concentrados de acuerdo a las necesidades de tu piel. 
• Paso 5: crema hidratante, para sellar todos los productos anteriores y ayudarlos a trabajar durante la noche. Este paso es para todo tipo de pieles, siempre y cuando utilices un producto para tu tipo de piel. 

Recuerda que la constancia es la parte más importante de cualquier producto o tratamiento cosmético, por eso es muy importante que hagamos una rutina de cuidado de la piel en la mañana y la noche y no olvides que estos consejos se pueden adaptar a las necesidades de la piel de cada una.