Mitos y verdades sobre el lavado de pelo

Típico que vas al salón de belleza te cortas el pelo o lo tiñes, te peinan y quedas divina, preguntas qué fue lo que te aplicaron y te dan una lista inmensa de shampoos y productos maravillosos con los cuales te dejaron guapísima, los usas la mañana siguiente y el efecto wow, no está. ¿Qué fue lo que pasó?, ¿qué hice mal?, Si algo de esto te suena familiar no temas no es tu culpa, no es que los shampoos no sirvan o que tu pelo sea rebelde sino que necesitas aprender el ritual de lavado correcto.

A la mayoría de nosotras nadie nos enseñan a lavarnos de modo adecuado el cuerpo y pelo, pensamos que es un modo intuitivo hacer espuma y ya, pero la verdad es que para despertar la belleza de tu pelo debes limpiarlo con tiempo el cuero cabelludo, evitar el agua caliente y no aplicar más de cierta cantidad de enjuague al pelo y siempre de medias a puntas.

1-Lava tu pelo sólo cuando haya exceso de grasa

Sí como lo leíste, si tu pelo está bien no necesitas lavarlo continuamente de hecho muchas modelos y en especial chicas francesas cuidan de su cabellera limpiandola cada tercer día y aplicando shampoo en seco para refrescarla en caso de que sientan que está un poco apelmazada o deslucida. Toma en cuenta que de acuerdo al tricólogo Emmanuel Larrain del centro dermatológico de Chile, enfatizó que no importa si tu pelo está procesado con tintes, bases o es virgen, lo que importa es la cantidad de sebo que se junta en el cuero cabelludo eso determinará si requieres tomar un ragaderazo 3 0 7 veces a la semana.

2-Usa agua templada cuando laves tu pelo

Uno de los errores más frecuentes cuando tomamos un baño o simplemente lavamos nuestro pelo es abusar del calor o el frío para asearnos, por lo que se recomienda el uso de agua tibia que estimula el crecimiento del pelo y no irritar el cráneo, ni los folículos pilosos. Ya que al hacerlo el cabello se vuelve quebradizo y opaco. Procura que el agua esté tibia y ¡disfruta del baño y de un pelo hermoso!

3-La porción de shampoo lo es todo

De acuerdo con el tricólogo Emmanuel Larrain, debes poner sólo un poquito de shampoo en la palma de tu mano y distribuirlo sobre el pelo completamente mojado, sobre el cráneo para que  los folículos absorban los nutrientes y propiedades del artículo de belleza, de nada sirve ponerte mucho producto sino lo distribuyes mal. Debes masajear la cabeza cuando laves el cabello en movimientos circulares y después enjuagar con el agua. Si tu pelo es muy largo no te preocupes, repite el paso, pero máximo dos veces, sino lograrás el efecto inverso resecarlo en vez de avivarlo.

4-El tiempo correcto bajo la regadera

Ahora que ya sabes cuál es la dosis de shampoo y la cantidad de veces que debes lavar el pelo, debes aprender cuánto tiempo debes pasar bajo el agua. Lo ideal es que tu pelo esté completamente húmedo para que lo puedas estimular de raíz y que el shampoo cumpla su función, todo esto por 5 minutos, recuerda que puedes cerrar la llave de agua para que no se desperdicie el chorro corriente, ya que hayas obtenido una espuma es momento de aclarar con agua. ¿Ves, simple no? 

5-Acondicionador un paso opcional

Para muchas chicas usar el acondicionador es un paso obligado para sellar el cuidado de su cabeza, ya que ello permite que el pelo se alise y no se encrespe, pero por otro lado su uso continuo adelgaza el pelo. De acuerdo con Marina Sánchez dermatóloga del Centro de Salud Municipal de Quito Ecuador, el uso del acondicionador debe de ser moderado y siempre de medias a puntas porque si lo aplicas desde la raíz es posible que debilite al pelo haciendo que este se caiga, cosa que no queremos. De modo que si tienes pelo con tendencia ondulada o rizada trata de usarlo lo menos posible y sólo para las puntas, ello para que no se desvanezca la curvatura natural de tu pelo.