Desmaquillante en bálsamo: cómo usar este producto para limpiar tu rostro
Para mantener un rostro saludable y cuidarlo correctamente, es importante que le des prioridad al uso del desmaquillante bajo una presentación que sea beneficiosa para tu piel
El desmaquillante es uno de los pasos más importantes dentro de una rutina de skincare, ya que es el encargado de retirar cada uno de los productos aplicados durante el maquillaje, al igual que la capa superficial de residuos y suciedad. No obstante, en el mercado de la belleza existen una gran variedad de opciones y presentaciones que pueden funcionarte o no según tu tipo de piel. En esta oportunidad, te hablaremos específicamente de los desmaquillantes en bálsamos, un producto que puede beneficiar cualquier tipo de piel.
Los bálsamos desmaquillantes son cremas espesas diseñadas a base de componentes que tienen la capacidad de retirar los productos que se encuentren sobre la zona en la que se aplique, ya que cumplen con la función de descomponer el maquillaje, la suciedad, el exceso de grasa y otras impurezas de la piel, por lo que también cumplen con una acción limpiadora. Además de ser agradables al tacto y tener un fácil procedimiento de uso, estas presentaciones incluyan otra serie de beneficios que las hacen destacar frente a otras opciones como sprays, cremas livianas y toallitas.
¿El desmaquillante en bálsamo es una mejor opción?
Una de las principales características que hacen destacar al desmaquillante en bálsamo, es que es un producto que puede ser utilizado por cualquier tipo de piel, ya que estos suelen convertirse en un sedoso aceite al masajearlo sobre el rostro y al aplicar el agua se convierte en una especie de leche que se disuelve fácilmente. Tras esta forma de actuar, notarás como tu piel obtiene un acabado más suave, brillante y fresco, con una opción que no reseca, ni deja la piel grasosa. Por este motivo, es recomendado para pieles secas, grasas, sensibles, con tendencia a acné e incluso para quienes padecen de enfermedades específicas.
Del mismo modo, este tipo de desmaquillantes actúan de forma más rápida sobre la piel en comparación a otros métodos tradicionales, y en muchas ocasiones, incluyen componentes que también se encargarán de nutrir tu piel. Incluso, muchos portales de belleza resaltan su eficacia para arrastrar cualquier tipo de suciedad. Sin embargo, posteriormente debe ser acompañado de un limpiador en la presentación que desees.
Otra de las grandes ventajas de este tipo de presentación es que te ayudará a usar la cantidad de producto realmente necesaria, gracias a su presentación espesa y sólida que empieza a «derretirse» al entrar en contacto con la piel con masajes circulares. Es decir, con muy poco producto puedes limpiar todo tu rostro. Además, la mayoría de estas presentaciones son capaces de trabajar sobre cualquier producto de maquillaje, incluso sobre las máscaras de pestañas que en muchas ocasiones representan un reto y suelen debilitarse al frotarlas constantemente.
¿Cómo incluirlo en tu rutina de skincare?
La forma correcta para incluir este producto en tu rutina de cuidado de la piel, es aplicarlo como el primer paso después de un largo día en el que desees retirar el maquillaje o la suciedad acumulada en el rostro. Por ello, suele usarse solo en la rutina nocturna. Inicia por tomar una pequeña porción y distribuirla por toda tu piel con ayuda de suaves masajes circulares. Una vez que te hayas asegurado de cubrir cada zona, enjuaga el producto con abundante agua. Es necesario que apliques un limpiador para asegurarte de cerrar con esta primera parte y luego, puedes continuar con el resto de pasos dentro de tu rutina, como el tónico, hidratante, tratamiento y contorno de ojos.
Además si quieres una recomendación para iniciar con este producto, te invitamos a conocer sobre el desmaquillante en bálsamo Clean 10 de Juno & Co ($14.99), que está disponible en Amazon. Esta opción esta diseñada con una lista de 10 ingredientes que se encargan de remover todos los rastros de maquillaje, suciedad y residuos, al mismo tiempo que ilumina el rostro, reduce las manchas oscuras, hidrata, nutre y previene el envejecimiento por sus propiedades antioxidantes.
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