Cómo preparar la piel antes de exponerte al sol para evitar las manchas y el envejecimiento

El cuidado de la piel empieza por protegerla de los rayos solares, ya que estos son los encargados de ocasionar grandes daños, por lo que se aconseja preparar la piel antes de exponerla al sol

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Cuida tu piel de los rayos solares para evitar las consecuencias negativas. Crédito: New Africa | Shutterstock

El sol es uno de los principales factores que puede perjudicar el aspecto de la piel, principalmente porque su radiación UV causa envejecimiento prematuro y daños que pueden terminar en cáncer. Por ello, en esta ocasión nos encargaremos de compartirte cómo puedes proteger tu piel antes de exponerte al sol.

Los rayos UVB son absorbidos por la epidermis, lo cual estimula la producción de melanina, un pigmento encargado de causar manchas en la piel. Al igual que disminuye la elasticidad, favoreciendo la aparición de arrugas.

Además, estos rayos pueden causar daños directos al ADN, que a largo plazo, pueden conducir a la formación de cáncer en la piel.

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Antes de salir, asegúrate de cuidar tu piel con los productos adecuados contra el sol.
Crédito: JLco Julia Amaral | Shutterstock

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Rutina para cuidar la piel antes del sol

1.- Limpiar el rostro

El primer paso para empezar con el cuidado de la piel consiste en limpiar, ya que de esta forma se logra retirar los rastros de suciedad, el exceso de sebo y se disminuye la obstrucción de los poros.

De hecho, este paso resulta ideal para mejorar la absorción de los siguientes productos, específicamente en el caso del protector solar, que resultará esencial para proteger el cutis de los rayos UVB.

En este sentido, aplica un limpiador facial de acabado suave e hidratante para eliminar la suciedad. En caso de tener acné o puntos negros, te invitamos a conocer nuestra lista sobre los mejores limpiadores con ácido salicílico.

2.- Hidrata a profundidad

La hidratación de la piel es otro de los pasos que jamás puede faltar en tu rutina, ya que será la mejor herramienta para revertir gran parte de los daños que pueden ocasionar los rayos solares.

Las cremas y sérums hidratantes se encargan de equilibrar los niveles de agua, fortalecer la barrera protectora y ofrecer protección frente a los agentes externos en las zonas más delicadas, como el clima y la contaminación.

Además, muchos estudios han revelado que una piel deshidratada es más propensa a presentar envejecimiento prematuro, ya que se seca y pierde su capacidad de repararse.

La hidratación resulta ideal para prevenir la aparición de arrugas, mantener fuerte la barrera cutánea y mantener un aspecto saludable.

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Limpia e hidrata tu piel para mejorar su cuidado.
Crédito: Anna Gawlik | Shutterstock

3.- Utiliza buen protector solar

Finalmente, llegó el paso más importante para cuidar la piel de los rayos UVB, y se trata del uso del protector solar. Este producto esta diseñado específicamente para bloquear la radiación y evitar la producción de radicales libres.

Esta dermatológicamente probado que el protector solar puede ayudar a reducir las probabilidades de desarrollar cáncer en la piel, ya que ofrece una preservación directa y evita complicaciones futuras.

La Fundación del Cáncer a la Piel aseguró que el uso diario de bloqueadores solares con factor de protección mayor a 15, «reduce el riesgo de contraer carcinoma de células escamosas en un 40% y disminuir el riesgo de melanoma en un 50%».

Además, el protector solar también ayuda a prevenir la aparición de quemaduras solares, reduce las señales de envejecimiento prematuro, promueve un tono de piel uniforme, y por supuesto, disminuye la aparición de manchas solares.

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4.- Usa accesorios para protegerte

Si deseas cuidar tu piel de los rayos solares, te aconsejamos evitar las horas de mayor alcance de los rayos, que comprenden entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, ya que estos puedes proyectarse hasta en la sombra.

No obstante, en caso que tengas que salir durante estos momentos del día, puedes hacer uso de accesorios que te ayuden a evitar el contacto directo con el sol, como los sombreros y lentes de sol.

Recuerda que también es importante cuidar la piel de tu cuerpo, por lo que en estas horas te recomendamos usar prendas de vestir cubiertas o hacer uso de los protector solar. Reaplicalo cada 3 horas, en todas las zonas del cuerpo, incluyendo el rostro.

¡Cuida tu piel a tiempo y evita los daños ocasionados por el sol!

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